Mis manos
aún no sienten la quietud que trae consigo la calidez del alba que asoma de
entre las montañas de éste mi paisaje
que contemplo todas las mañanas
desde la parada del bus.
Creo que es
el frío el que no las deja quietas, y mis pensamientos, que en revolución
expulsan letras y más letras volcadas en una minúscula libreta que apenas puedo
sostener entre ellas.
Y amanece,
poco a poco el día se deja ver, tal vez con cuernos y tridente, o tal vez, como
nave misteriosa que me lleve, no sé dónde, pero que me lleve…
Y hay
silencio en el resto del mundo. Tan sólo se escucha lo que por mis oídos
cubiertos por mi gorro, dejan pasar a través de mi auricular, cambiando
el mutismo de ahí fuera por el jazz.
Y abro las
puertas de mi alma, de mis pensamientos y toda la maraña de ideas, locuras y
delirios que desfilan entre las montañas y mis ojos mientras los despejo aún de la sombra de Morfeo…
Pasan los
minutos y me hielo, me refugio… desde dentro.
Llega el
bus…
Siento las
tostadas de mi desayuno dando vueltas de campana en mi estómago ante este
frenético movimiento y zigzag al que me somete el vehículo en el que me
encuentro. Hasta mis letras van locas y se salen del papel para pintar sobre
mis piernas… éstas que se agarran como pueden al asiento ante el peligro de
salir despedida al pasillo de este circuito suicida de busero carajillero.
Vaya con la
nave… esta vez no voló entre nubes y aves, aunque sí voló entre chirridos y
derrapes.
Pero… un
momento… sí… aún hay tiempo...
TIEMPO 1 “Miradas”
Al tiempo se
apartaron para dejar pulsar al otro, al tiempo sonrieron, y al tiempo se
chocaron sus hombros tras caminar hacia dentro del ascensor.
Las puertas
se cerraron, cada uno pulsó un botón, y sus miradas se ausentaron, se
perdieron, al tiempo que sus mentes divagaban por el más allá de aquel instante.
Y el
ascensor quedó paralizado, como el tiempo, que dejó de mover sus manecillas en aquel
lugar cerrado a cal y canto.
Y de nuevo
al tiempo sus miradas se encontraron, incrédulos de lo que estaba pasando, y al
tiempo que una voz les avisaba, que en veinticinco o treinta minutos estaría
solucionado.
Ella se
quitó su gorro liberando su cabello, al tiempo que él la observaba… y ella,
lo miraba…
Ni una
palabra, ni una palabra en ese tiempo de miradas…
TIEMPO 2 “Palabras”
-Hay tiempo,
supongo, para respirar… -comenzó diciendo ella…
-Tranquila,
hay tiempo para respirar, y más…
-Nunca pensé
que algo así me sucedería…
-¿Y tampoco
lo imaginaste?
-¿Imaginar?...
-Si… fantasear…
-Si digo que
no, mentiría, ¿quién no lo ha hecho?...
-¿Hacerlo o
imaginarlo?
-Imaginarlo es más fácil, supongo…
-¿Nunca
haces lo que imaginas?
-Siempre que
puedo… aunque me gustaría decir, siempre que quiero…
-Si quieres, puedes…
-Lo cierto
es que yo quiero… y ahora puedo… ¿y tú, quieres?
-Quiero…
TIEMPO 3 “Entrega”
Y el tiempo
quedó mudo y ciego, rendido a la piel que derrochaba caricias…
Y sus manos
se entrelazaron sujetando las ganas, y sus labios se buscaron, se juntaron en
el tiempo que tenían. Se besaron, se devoraron como si fuera el último día de
sus vidas. Sus gemidos arañaban al silencio que los resguardaba, que los ungía
en piel y alma. Y él buscaba su mirada para penetrarla al tiempo que a sus
lujuriosas pupilas, y ella lo miraba, y le hablaba con su mirada, y el tiempo
los llevaba al viaje sin retorno del placer de sus cuerpos…
Y el tiempo
acaparó miradas, palabras, entrega… al tiempo que el tiempo se consumía en
aquella cerrada estancia, abierta, a un maravilloso comienzo…
TIEMPO 4 “Comienzo”
Siempre hay
tiempo, para un comienzo…
©Ginebra
Blonde
Siempre lo hay, como también hay tiempo para que un inesperado se convierta en comienzo.
ResponderEliminarUn placer, Ginebra, besos
Así es Ame… Ese tiempo a veces tan escurridizo, también nos muestra ese espacio infinito e intenso para sentir…
EliminarEl placer mío, amiga, feliz de sentirte por aquí…
Bsoss!! ♥♥♥
El ascensor es esa puerta a intimidades compartidas en la brevedad del tiempo. Uhmmm!!
ResponderEliminarY de qué manera se pueden llegar a saborear unos minutos concedidos… ;-)
EliminarUn placer tu sentir, Luis XL...
Bsoss de madrugada!
Muy buen relato, bien desarrollado y el diálogo me ha gustado. Tiempo, esa medida que hay que saber conjugar.
ResponderEliminarBesos dulces.
Me viene a la cabeza esa frase de… “Lo importante no es saber cuánto tiempo tenemos, sino, saber qué hacer con el que tenemos”… ;-)
EliminarFeliz por tus palabras y tu sentir, Dulce…
Gracias por tu mirada!!
Bsosss!!
Me ha gustado tu relato, intenso y lleno de detalles, me quedo sobre todo con ese final, un placer leerte Ginebra
ResponderEliminarBesos dulces y feliz fin de semana
El placer es mío, Slave… Mil gracias por tu sentir…
EliminarFeliz fin de semana para ti también ;-)
Bsosss!! ♥♥♥
Casi nunca presto mucha atención a tus textos... me quedo embelesado viendo esa foto... de la bloguera más atractiva del mundo mundial. ¿Se puede ser más superficial que Pitt el loco? Pero es que esa belleza tuya me obnubila.
ResponderEliminarBueno, la locura está bien, ésta nos hace traspasar esa barrera que en condiciones normales no cruzaríamos, por lo tanto, nos perderíamos grandes o pequeñas cosas de la vida, que sólo se saborean con esa maravillosa locura a cuestas… Así que por mi parte, genial Pitt!! Me confieso identificada con esa faceta “a veces” jajaja…
EliminarBsoss y cariños , amigo, me gusta sentir “tu locura” por aquí…
"Pero también léeme, eh¿?" ;-) Muacksss!!!